Gonzalo Montero Lara*
RESUMEN
El estudio de textos antiguos y
otros documentos históricos y arqueológicos ha demostrado que la fantasía ha
estado presente en mitos leyendas y cuentos, en todas las culturas.
El análisis del cuento quechua titulado
“El joven que subió al cielo”, de autor anónimo, recopilado por el peruano
Jorge. A Lira y publicado por el escritor boliviano Jesús Lara en su obra MITOS, LEYENDAS Y CUENTOS DE LOS QUECHUAS,
muestra elementos que pueden inscribir a la obra como una de las primeras
dentro el género de la narrativa fantástica y de ciencia ficción en la cultura quechua.
INTRODUCCIÓN
Es un verdadero privilegio,
convertirme en un heraldo circunstancial de la fantasía literaria, género que
de ninguna manera es “nuevo” para nosotros, por el contrario, ha nacido con el vagido
de la imaginación e inteligencia humana y no ha dejado de crecer hasta el día
de hoy, constituyéndose en un poderoso vehículo capaz de transportarnos por
insólitos planos de tiempo y espacio. En
nuestras culturas de origen, la fantasía ha surgido con el pensamiento mágico.
Al respecto, Adolfo Cáceres Romero en su
Nueva Historia de la Literatura Boliviana escribe:
“… con voces secretas en aguayos
y vasijas, junto a mudos rostros de piedra que aguardan alguien descifre su
mensaje…”
Invitando a descubrir fabulosos tesoros escondidos, como es el caso de un cuento quechua, puesto a la luz por investigadores. Antes de entrar a considerar un caso singular de la tradición oral quechua, pongo de referencia un breve marco conceptual de para la literatura fantástica y ciencia ficción:
Invitando a descubrir fabulosos tesoros escondidos, como es el caso de un cuento quechua, puesto a la luz por investigadores. Antes de entrar a considerar un caso singular de la tradición oral quechua, pongo de referencia un breve marco conceptual de para la literatura fantástica y ciencia ficción:
“La literatura fantástica, es un
género literario de ficción en forma de novela o relatos cortos. Las formas
sobrenaturales son un elemento primario del argumento, tema o medio ambiente.
Está asociado de manera muy cercana a la narrativa maravillosa, la ciencia
ficción y el terror”.
“Lo fantástico es la vacilación o duda
experimentada por un ser que no conoce más que las leyes naturales, frente a un
acontecimiento aparentemente sobrenatural”.
Tzvetan
Todorov
En cuanto al género de la
ciencia-ficción, he tomado una definición muy explícita, de una abundante
oferta de que la considero adecuada al objetivo de mi ponencia:
“Podemos definir la ciencia ficción como un género literario y, también hoy en día, cinematográfico que se centra en la anticipación científica de acontecimientos y de antes situados en tiempos y espacios ficticios; sus grandes núcleos temáticos son: la conquista del espacio, los extraterrestres, los viajes a través del tiempo, la utopía social y científica y el hombre del futuro”
“Podemos definir la ciencia ficción como un género literario y, también hoy en día, cinematográfico que se centra en la anticipación científica de acontecimientos y de antes situados en tiempos y espacios ficticios; sus grandes núcleos temáticos son: la conquista del espacio, los extraterrestres, los viajes a través del tiempo, la utopía social y científica y el hombre del futuro”
I.- LA NARRATIVA FANTÁSTICA EN LA
CULTURA QUECHUA
En esta ocasión, no pretendo
exponer un dedicado trabajo de investigación respecto a la aparición de la
narrativa fantástica en, nuestras culturas de origen, solo intento amplificar
el advenimiento del inusitado oleaje de este género en nuestro medio, cuyas
primeras referencias hallamos en las recopilaciones de la literatura quechua
realizadas por el escritor Jesús Lara en su obra MITOS, LEYENDAS Y CUENTOS DE LOS QUECHUAS y en las investigaciones de Adolfo Cáceres
Romero, que se pueden leer en el primer tomo de NUEVA HISTORIA DE LA LITERATURA BOLIVIANA I Literaturas Aborígenes. La
narrativa fantástica se nutre de la mitología universal en general y de los
pueblos originarios en particular. Ya
Garcilaso de la Vega confrontó fabulas quechuas y griegas señalando “…Y también se puede cotejar las (fábulas) de una
gentilidad con las de la otra, que en
muchos pedazos se remeda”. “Y es así,…”, señala al respecto el Jesús Lara “…con la diferencia de que los mitos de la
Hélade llegan acrisolados, embellecidos por los grandes creadores de la epopeya y de la tragedia, en tanto que los
quechuas nos vienen como el tubérculo
recién extraído de la tierra y como la mazorca despancada del propio tallo”.
Nuestros escritores que cultivan
este agradable género literario, de vigoroso crecimiento han encontrado, una
rica cantera temática en nuestros mitos, leyendas y tradiciones culturales, con
sabores tan variados como las tonalidades de un whipala, las cuales desde épocas
ancestrales, han marcado nuestro paso diario entre lo que juzgamos natural,
extraño, o sobrenatural, expresados y
transmitidos por la tradición oral, en la certidumbre de lo sobrenatural
inquietando nuestro ánimo de forma permanente. Por ello, no es extraño que personajes
o circunstancias que nos asombraron en la niñez, cobren palpitante vida en la voz
de relatores cotidianos (madres, abuelas, personas mayores, etc.). Muchos de
estos actores u acontecimientos han sido recogidos con generosidad, en trabajos
literarios como el fabuloso inventario de SERES
SOBRENATURALES Y MAGICOS DE BOLIVIA, realizado por el investigador y
escritor Homero Carvallo Oliva, para luego hacerlos protagonistas de relatos fantásticos, maravillosos, de ciencia
ficción o terror. Corriente literaria,
reitero, en actual emergencia, con publicaciones de calidad, cada vez más
nutridas en obras de autores
contemporáneos locales y nacionales, donde podemos citar algunos comprometidos con el género: Fanny
Escobar, Gionanna Rivero, Sara Mancilla, Biyú Suarez, Ada Castellanos, Vanessa Giacoman, Sisinia Anze, Ana
Triveño, Ivan Prado, Dennis Iriarte,
Miguel Lundin, Miguel Esquirol, Hugo Murillo, solo para nombrar algunos, sin dejar de mencionar a otros de
notable trayectoria que han incursionado en estas letras como, Néstor Taboada, Adolfo Cáceres, César Verduguez, Gonzalo
Lema, Rodrigo Antezana, Gary Daher,
Edmundo Paz Soldán, Manuel Vargas, Pedro Shimose y los premios nacionales, Álvaro Pérez y Ronald
Rodríguez y muchos más que han realizado incursiones importantes por los fantásticos espacios de lo extraño,
sobrenatural y fantástico. Producto de
este verdadero Tsunami literario de narradores fantásticos, en menos de un año
han surgido importantes selecciones en las obras como DE IMPOSIBILIDADES
POSIBLES I, Antología de cuento maravilloso, VERTIGO I Antología de cuento
fantástico, y EDADES REMOTAS I antología de ciencia ficción.
II.- UNA MIRADA DESDE LA CIENCIA FICCIÓN AL CUENTO
QUECHUA:
“EL JOVEN QUE SUBIÓ AL CIELO”
Así, delineada en forma resumida
la narrativa fantástica en general y la ciencia ficción en particular, he
seleccionado un cuento de la cultura quechua titulado “El joven que subió al cielo”,
recogido y traducido por los peruanos Jorge A. Lira, traducido por José María Arguedas
y difundido en nuestro medio por el boliviano Jesús Lara. El cuento relata la historia
de una joven pareja, ella, una bellísima mujer bajada del cielo, capturada por
el cuidador de una plantación de extraordinarias papas. Ella huye a su mundo y
él la persigue transportado por un cóndor en un largo viaje. Este apretado
resumen es necesario antes del análisis de algunos elementos del cuento, que a
la luz del pensamiento y el avance tecnológico actual, más las predicciones
contemporáneas la c.f, me llevan a pensar que este cuento quechua es del género
de la ciencia-ficción, definida así, por incorporar elementos tradicionales de
este género, diferentes del pensamiento mágico y ajustados a la evolución tecnológica
predecible.
ELEMENTOS “ANTICIPATIVOS” DE
LA NARRACIÓN
1.- Presencia en la historia de
seres extraterrestres idénticos e indistinguibles entre ellos, con semejanza
humana, muy bellas, de piel blanca, todas hembras. Descritas por el protagonista
de la historia como las “jóvenes, princesas y niñas blancas”.
2.- Es posible que el joven
cuidador de una chacra de papas las cuales eran misteriosamente “robadas”, haya
presenciado la llegada de una misión de clones del espacio exterior. Sostengo el
concepto de “clones” por la semejanza de estos seres entre ellas, y además
todas del mismo sexo. Además en su mundo durante la observación de un ritual
religioso, todas las participantes eran por supuesto mujeres.
3.- Ellas “eran mujeres vestidas de plata”,
apariencia con mucha probabilidad debida a sus trajes espaciales de aspecto
metálico,
4.- La probable presencia de
naves de transporte espacial invisibles
o camufladas, se puede deducir del fragmento: “tomando la apariencia de
princesas, eran las estrellas que bajaron del mismo cielo” señala el texto.
Como no se describen ingenios de vuelo
visibles, es posible que sus naves hayan contado con algún medio de tele transportación
o succión, para moverlas a los seres hasta la tierra. “las demás se elevaron, como
luces que se mueren”.
5.- La llegada de estos
seres idénticos a la chacra “especial”, probablemente tenía fines de control
de una eventual experimentación biológica en el cultivo de singulares
características, como el tamaño de las papas: “…de excelsa clase de
semillas”.
6.- Estas bellas intrusas,
contaban con alguna clase de tecnología que les permitía inducir el sueño al
cuidador de la chacra sin aproximarse, mientras recolectaban el producto de su
interés, recuerden que en el mundo de origen de las “princesas”, existía una
quinua de propiedades mejoradas, que para uso alimentario, en proporciones
usuales del planeta tierra excedían el volumen y rebalsaban del preparado y aún sometidas a la ebullición
eran capaces de germinar con rapidez en el piso.
7.- El aborto que tuvo la “Princesa” capturada y
amada por el joven quechua, puede representar el posible fracaso de la
hibridación entre seres de diferente especie con distintos e incompatibles
códigos genéticos y con algún grado de incompatibilidad.
8.- tampoco existía afinidad
social. Al ser aprisionada, le rogó al muchacho por su liberación y expresó a
gritos: “no me obligues a vivir en la tierra”, ratificando su origen extraterrestre
y su rechazo a las condiciones de vida de la sociedad terrícola, menos civilizada,
poco atractiva para ella o simplemente diferente, pero le producía temor
9.- El protagonista en su
desesperación por la fuga de su amada prisionera, estableció un contacto con el
tripulante de un ingenio volador llamado Mallku, capaz de conducirlo al mundo
de la “Princesa” durante un año de viaje, con el único requisito de ser
provisto de una fuente de proteínas de alto valor biológico. (carne de llama)
para su alimentación. Un ser “divino”, no hubiera tenido esa exigencia tan,
pero tan, humana.
10.- Al concluir el viaje de ida
y después de la permanencia en el mundo de la “Princesa”, hay un descripción
muy objetiva de los efectos orgánicos de envejecimiento prematuro en este
prolongado viaje cósmico.
11.- Como correlato al envejecimiento ocasionado
por la travesía, se describe un
procedimiento de rejuvenecimiento para viajeros
interestelares, consistente en el baño en un mar (¿rico en sustancias
revitalizantes?) para su reacondicionamiento físico, ubicado cerca del
astro-puerto donde arribaron y se sometieron a la llegada y antes del retorno
al planeta Tierra. Además este puerto de embarque y desembarque, probablemente
sirvió para el reabastecimiento, ya que no existían llamas para la alimentación
del retorno, esta vez a crédito.
12.- Se describe a grandes rasgos
una sociedad diferente de la terrícola, con un régimen probablemente matriarcal
e intolerante con los extranjeros (o extraños) o pretendientes. En una escala
axiológica no tan diferente a la nuestra, pues, ella le acoge a espaldas de los
“padres”, pero luego de tenerle un año escondido le abandona sin mayores
explicaciones pero seguramente debido a presiones externas no descritas, o por
temores de la “Princesa” a la reacción de sus progenitores.
No se
describe la estructura social de este mundo, pero se narra una celebración
religiosa en un culto al sol y la luna “Era el resplandeciente templo del Sol y
de la Luna. El Sol y la Luna, padre y madre de todas las estrellas y de todos
los luceros”, en un templo.
13.-Este culto muy parecido al de muchas culturas
terráqueas, sumado a la duración del viaje de un año aproximadamente, da la
idea de la localización de este probable exoplaneta en este sistema solar o uno
vecino.
14.- La existencia de alimentos terrícolas (quinua)
con propiedades extraordinarias, o por el contrario, eran alimentos originarios
de ese otro mundo, exportados y adaptados las condiciones de la tierra para consumo
de nuestra especie. Si ese era el propósito ¿Por qué?
15.- Luego de tres años de ausencia, dos del viaje
de ida y vuelta más uno de la permanencia en otro mundo, “El joven que subió al
cielo” encontró a sus padres “muy viejos, muy viejos”. Es probable que el
tiempo haya discurrido en nuestro planeta de manera diferente. El cóndor, que
probablemente sea un navegador extraterrestre, devuelve al joven a sus padres
“sano y salvo” consolándoles.
III.- CONCLUSIÓN:
Con la mente abierta, libre de
prejuicios que limitan el pensamiento y tratan de encadenar lo más bello de la
literatura fantástica: la imaginación. Este hallazgo que no es mío, por lo demostrativo
constituye una pieza clave de la arqueología literaria, que permite reconstruir
de a poco los orígenes de nuestra literatura escondida en nuestras raíces
culturales donde la imaginación era fecunda o plantea la alternativa implícita,
si existieron contactos reales con civilizaciones extraterrestres. Por lo
descrito, no es difícil pensar, que este cuento quechua, haya partido de una
experiencia “real”, y llegado a nosotros con los condimentos propios de una
cultura que en ese momento de su desarrollo, no hallaba un correlato de
referencia como el que disponemos en la actualidad para interpretar muchos elementos
anticipativos que hoy no fueron difíciles de localizar en esta magnífica pieza
literaria de ciencia ficción, llegada a nosotros mediante insignes
investigadores y literatos peruanos Jorge A. Lira, José María Arguedas y el
boliviano Jesús Lara.
Bibliografía
-Cáceres Romero Adolfo, NUEVA HISTORIA DE LA LITERATURA BOLIVIANA
I Literaturas Aborígenes. Editorial
“LOS AMIGOS DEL LIBRO”: Cochabamba, 1987.
Capana Pablo, CIENCIA FICCIÓN. Utopía y mercado.
Buenos Aires: Cántaro, 2007.
-Lara Jesús, MITOS, LEYENDAS Y CUENTOS DE LOS
QUECHUAS, El joven que subió al cielo, paginas 265-273. Editorial “LOS AMIGOS
DEL LIBRO. 3° edición: Cochabamba-Bolivia, 2003.
Todorov, Tzvetan, INTRODUCCION A LA LITERATURA FANTÁSTICA. 2° edición, México, 1981.
*Escritor y poeta.
Este trabajo fue presentado en el Primer Encuentro de Ciencia Ficción y Literatura Fantástica de Bolivia en la ciudad de Santa Cruz en septiembre de 2015.
Este trabajo fue presentado en el Primer Encuentro de Ciencia Ficción y Literatura Fantástica de Bolivia en la ciudad de Santa Cruz en septiembre de 2015.
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